La fundación del Real Zaragoza. Las fusiones

Es 1932 la fecha real de fundación? , somos el Iberia o el Zaragoza es un club totalmente nuevo?

Cuantas veces nos hemos hecho esta pregunta?, E incluso hemos oido varias corrientes, unos que somos el Iberia, otros que somos un club nuevo, con fecha de fundación 1932, e incluso existe la corriente de que la fecha es 1922 todas argumentadas y pudiendo tener razón.

Muchas veces nos habéis preguntado, que habíamos encontrado, investigado, cual es nuestra postura, vamos a intentar explicaros la situación y comprender de una forma sencilla y de andar por casa lo que sucedió. Nosotros como cada uno de vosotros tenemos nuestra postura, no sabemos si es la más correcta, pero si la única que encajan todas las piezas. Que cada uno saque su conclusión alla vamos...

 Para empezar a entender lo sucedido tenemos que retroceder a 1929, al famoso Crack del 29, una crisis mundial bestial, que deja a  ciudadanos, empresas y sociedades al borde de la quiebra en todo el mundo, y los clubes de fútbol no iban a ser menos. Los gastos en jugadores, fichajes aumentan considerablemente, y sobre todo aumentan los gastos en los desplazamientos, la recién creada Liga, obligaba a los clubes a viajar por toda España.

Hasta hacia apenas unos pocos años, solo disputaban un campeonato regional (aragones) y los dos primeros clasificados jugaban la copa España, (actual copa del Rey) en un sistema de liguilla por proximidad, es decir que siempre nos tocaban equipos vascos, catalanes y valencianos principalmente. Pero además de eso ahora se disputa la Liga, y en ella el Iberia esta en Segunda, y el Real Zaragoza en la tercera categoría, teniendo que viajar por toda España.

La suma de gastos en desplazamientos, jugadores, es cada vez mayor, pero por contra los ingresos por socios y taquilla se va desplomando al no tener el aficionado la capacidad económica de antaño debido a la crisis que azota.

Los equipos se van endeudando, son cada vez más deficitarios, y en muchos casos necesitan de una inyección económica de sus socios y directivos más acaudalados para seguir adelante

En Zaragoza hay tres equipos punteros, el Iberia, el Real Zaragoza y el Patria Aragón. El Iberia, S.C. entra en un declive económico sin precedente pero al ser el club de mayor categoría, consigue sobrevivir a duras penas gracias al ser el club con más ingreso por socios y taquilla.

El músculo económico está en los socios y dirigentes del Zaragoza tomate, pero sin embargo los éxitos deportivos no acompañan y está cansados de poner pasta en un club que no consigue sus objetivos deportivos.

Con la taquilla en el Iberia y el musculo económico en el Zaragoza, el Patria como tercero en discordia, está abocado a una quiebra económica.

Rápidamente a finales de 1929 comienzan los movimientos de fusión entre Patria y Real Zaragoza, la cual se dilataría hasta marzo de 1930 momento en el que llegan incluso a jugar un partido fusionados, pero cuya fusión no llega a materializarse en los despachos, y como consecuencia un año después desaparece el Patria Aragón por causas económicas.

 Tras el fracaso de fusión entre Rojillos y blanquillos, el Iberia mueve ficha y a finales de 1930 comienzan las primeras voces de la necesidad de unión entre avispas y tomates.

La presión mediatica se hace fuerte, los  problemas económicos de ambas entidades apretan, pero el desastre deportivo del Iberia desencadena todo.

Tras años a las puertas del ascenso de primera, un mal comienzo hace que se instale el Iberia en una decepcionante parte media de la clasificación, la moral Iberista decae y provoca un horroroso final de temporada, y con una victoria en ocho partidos, desciende por un solo punto a la tercera División.

 El Patria Aragón desaparece, y los dimes y diretes corren como la espuma con el Iberia siguiendo el mismo camino.

Hundido el Iberia económicamente y deportivamente, unir a su causa al músculo económico zaragocista, a cambio de tragarse el orgullo de ser salvados por el eterno rival es a dia de hoy la única solución del Iberia y del fútbol aragonés.

Tras un verano de conversaciones los dirigentes de ambos clubes ven la necesidad de fusionarse para evitar la catástrofe deportiva en la ciudad. La prensa se posicionaba a favor de la fusión, las directivas de acuerdo, llega el momento de pasar el trámite de la junta extraordinaria.

Todo era un hecho, todo estaba preparado y acordado en Agosto de 1931, pero en el último momento la facción tomate más dura decide oponerse a una unión con el eterno rival que tantas veces le había pisoteado y ninguneado.

Los socios tomates se revelan, se levantan contra sus directivos y con una aplastante mayoría deciden no fusionarse.

La noticia cae como un jarro de agua fría en el Iberia, que ve en el horizonte la desaparición. Mientras que los socios del Real Zaragoza, están exultantes y satisfechos… están alegres, creen que el Iberia está por fin a su merced, y el final de la hegemonía avispa llegado, sin embargo … se dará la vuelta la tortilla, la sentencia de muerte está firmada.